viernes, 28 de junio de 2013

Escrito por Unknown | Etiquetas : , , , ,

¿Qué es el Testamento de Enkidu? ¿Quién era ese señor?

Enkidu, según la mitología sumeria, fue un ser creado por Aruru, la diosa de la tierra, para enfrentarse a Gilgamesh, el déspota rey de Uruk, obsesionado con la inmortalidad. Los dioses oyeron las quejas de la gente acerca del monarca, por lo que crearon a un ser de fuerza similar. Enkidu era todo salvajismo; inculto, primitivo e incivilizado, la antítesis de Gilgamesh, representante de la civilización y el avance humano.
Ya en los albores de la civilización, la batalla entre lo salvaje y lo civilizado surge. Según cuenta la epopeya sumeria, entre ambos némesis acaba aflorando la amistad tras la cruenta batalla. Ambos unen fuerzas en la búsqueda de la vida eterna, corriendo mil aventuras en el camino.
Pero la inmortalidad nunca llega. A pesar de la insistencia de Gilgamesh y las oportunidades que se presentan en su camino, falla constantemente en la consecución de la vida eterna, consiguiendo con ello que su amigo Enkidu muera durante la desesperada empresa.

Es curioso que la primera narración escrita conocida sea una perfecta moraleja acerca del devenir de la civilización y el progreso tecnológico. Creamos la civilización con el único fin de buscar la ansiada inmortalidad. Queremos vivir más años, y para ello nos ayudamos del progreso tecnológico, un motor que funciona gracias a los modelos industriales que requieren cadenas de montaje, trabajadores, economías, mercado y demás componentes que nos anclan a una vida basada en el trabajo y el capital. Vivimos en la ansiedad, la depresión y el hacinamiento, pero no renunciamos a ello con el fin de robarle unos años a la muerte, como Gilgamesh. Solo que, por el camino, Enkidu, agoniza. Llegará el punto en que ese ser, némesis del progreso, muera, llevándose consigo todo lo salvaje, lo natural y lo primitivo que tenemos dentro, para encontrarnos que a pesar de todo llegará el día en que moriremos todos. La raza humana llegará a su fin a pesar de lo mucho que busquemos nuestra inmortalidad como especie, sólo que de esta manera destruiremos nuestra propia humanidad y todo lo que nos rodea en el proceso.

El Testamento de Enkidu quiere recoger esa moraleja; el uso de la ficción como medio para exponer ideas de índole anarquista y opuestas al progreso industrial.

¿Anarquismo, primitivismo y ficción? ¿Porqué no un blog de divulgación?

El anarquismo es la ausencia de Estado. A pesar de que normalmente es vinculado a un estado social caótico, al vandalismo o a movimientos de izquierdas como el comunismo libertario, es un concepto que no se limita a una afinidad política o un sistema de gobierno; es la ausencia de el mismo, con el cambio personal y social que conlleva. Tampoco es filosofía, no se trata de cavilaciones acerca de la naturaleza humana. El anarquismo llano es un concepto, una idea; es la esencia de la libertad individual y social. Y sólo ha habido una era en la que el anarquismo fuese el "régimen" gobernante; la era primitiva. Por lo cual, son conceptos que casi por obligatoriedad deberían estar unidos.

La ficción, no obstante, es un concepto más propio de la civilización. La música, la literatura o el cine son artes nacidas (o refinadas) en sociedades civilizadas, no así la imaginación o la creatividad. En las sociedades primitivas, siempre ha habido bailes, rituales, leyendas y toques de tambor que expresaban ideas, moralejas y sentimientos. Muchas líneas de pensamiento primitivistas son críticas con cualquier tipo de arte o incluso con el pensamiento simbólico, pero es innegable que es un canal de comunicación efectivo. Después de todo, tanto Internet como la imprenta son medios mucho más industriales que cualquiera de estos y son de uso común entre los teóricos más puristas. ¿Porqué no usar la ficción?

¿Esto es una web de relatos?

No. Al menos no exclusivamente. Este sitio pretende publicar ficciones con un punto de vista al menos cercano al anarquismo y el primitivismo. Evidentemente la creación ficticia más asequible para el creador es la literaria, pero no será esto una sucesión de cuentos acerca de buenos salvajes. Aunque este blog está abierto a cualquiera que desee publicar a través de él, me temo que la principal carga recaerá sobre el autor, quien de momento poco más que relatos puede escribir, pero que estaría encantado si pudiera publicar cualquier otro tipo de ficción como cómics o cine.

También habrán artículos de opinión, críticas y análisis, ya sea tratando temas de actualidad como comentando otras obras,  siempre y cuando tengan relación con los pilares del blog o se haga desde dicha perspectiva.

¿Sólo habrá ficción sobre volver a la edad de piedra?

En absoluto. Pero es cierto que todo creador tiene una inspiración, y el caso del de este blog, la inspiración es la muerte de la naturaleza a manos del progreso salvaje, y el yugo que gobiernos, corporaciones y demás sistemas de poder infligen en el ser humano. Esto no se debe traducir a historias repetitivas de revolucionarios logrando volver a la tierra o ciencia ficción distópica. También tienen cabida los dramas humanos causados por el hacinamiento, la ausencia de decisión en la sociedad masificada o la decadencia de la sociedad capitalista.

Los textos no pretenden ser panfletos publicitarios. Sólo pretenden ser un medio de fomento más o menos sutiles, usando la narrativa para explicar los problemas, las causas y sobretodo el origen del daño causado por la sociedad tecnoindustrial. Puede que se publiquen otros relatos que quizá toquen el tema muy por encima, pero una serie de ficciones enfocadas al mismo tema corren el riesgo de acabar marginados.

Con todo esto, sólo me queda daros la bienvenida, esperar que os agrade lo que leéis y que sobretodo os haga pensar.

3 comentarios:

  1. Soy el Sgt. Maderus, y, como buen pretoriano, es mi deber avisarle de que no queremos vagos en Roma. Desparasite -por un módico precio- a su perro y cambie su flauta por un instrumento "de verdad" (Todos queremos ser estrellas del rock). Le recomiendo que siga las pautas del buen ciudadano y abandone todo tipo de literatura no provechosa; pero no abandone la buena lectura, en Roma amamos a nuestros intelectuales: "Crepúsculo", "50 Sombras de Grey", "La enzima prodigiosa" y "El Alquimista" ya responderán a todas y cada una de sus dudas existenciales. Siga su -nuestro- camino, ciudadano.

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  2. Adán, esta mierda me encanta. ÁNIMO!!

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